700 Aniversario del Privilegio Sabatino

Escapulario bis

La Santísima Virgen María , en el año 1314 (o sea justo hace siete siglos) se apareció al Papa Juan XXII expresándole estas consoladoras palabras: «Quiero que mi Orden Carmelita sea favorecida en la Iglesia, y que les sea anunciado, conforme a lo que yo he alcanzado del Cielo, que todos aquellos cristianos devotos de mi advocación del Carmen que lleven impuesto el Escapulario (guardando la castidad conforme a su estado) y recen el Oficio Divino (y los que no sepan leer se abstengan de comer carne los miércoles y sábados)….Yo, como Madre de la Misericordia, con mis ruegos, oraciones, méritos y protección especial, les ayudaré para que, libres cuanto antes de sus penas, especialmente el sábado inmediato a su muerte, sean trasladadas sus almas a la eterna bienaventuranza».

El mismo Papa Juan XXII promulgó la Bula Sabatina (anuncio a la cristiandad de este privilegio mariano) en el año 1322. Paulo V le dio impulso definitivo a esta devoción en su pontificado a inicios del siglo XVII. Y San Pío X mencionó expresamente este privilegio en su decreto de octubre de 1910.

Queda muy clara la enseñanza de que llevar el escapulario (o en sustitución del mismo, tras la imposición, una medalla de la Virgen del Carmen y el Sagrado Corazón de Jesús) NO es un «instrumento mágico» para llegar antes al Cielo, y ni siquiera para salvarse con seguridad. Pues el escapulario requiere una recta intención de vida, una coherencia de la fe con las obras, y dentro de esa lucha interior ha de brillar con luz propia la virtud de la Pureza. Sólo de esa manera el escapulario anima de verdad la vida moral en la tierra y coopera a  la eterna en el Cielo.

Padre Santiago González
Padre Santiago González
Sacerdote de la archidiócesis de Sevilla ordenado en el año 2011

Del mismo autor

María Auxiliadora por ser CORREDENTORA

¡Qué hermoso es llamar Corredentora  a la Santísima Virgen María!!! Y...

Últimos Artículos

Voces en la tempestad

La reacción que tiene la mujer que es defendida...

Evocación del Jubileo y las indulgencias

Desde el atardecer y hasta la medianoche del 1º...