Un hogar católico: una familia que permanece unida en la Fe de Cristo…….es un verdadero tesoro de consecuencias eternas. Hoy más que nunca hay que valorar qué, a pesar de la secularización modernista, siga habiendo hogares cristianos en el mundo.
¿Cuales son los signos externos de una casa que se precie de ser un hogar católico?; por supuesto citamos signos externos que avalan realidades internas, pues «de la abundancia del corazón habla la boca» (Mateo 12, 34). Mencionemos estos:
– En la puerta de entrada hay un grabado de Jesús o de María
– En las ventanas o balcones se cuelgan signos según los tiempos litúrgicos
– En el interior de la casa no faltan imágenes de Jesús y de María, con decoro y sin empalago, para hacer presente la devoción a todos los que viven y también a los que visitan la casa
– La televisión no PRESIDE la sala de estar, sino que está a un lado discreto para usarla con moderación…y CUANTO MENOS…MEJOR!!!
– Se bendice la mesa en todas las comidas, y de hecho NO come cada uno por su cuenta
– Se reza en familia, pues familia que reza unida permanece unida (recordatorio habitual de San Juan Pablo II)
– Sobre todo se reza el Santo Rosario, la oración que más conversiones causa
– Los padres no permiten faltas de respeto a Dios, a la Iglesia, a María……….y educan a sus hijos en ese respeto que nace del cariño
– Tampoco se permite a los visitantes que se falte al respeto a la religión, desde una base no solo espiritual sino también social
– Se procura celebrar los eventos familiares con alegría y moderación, evitando dispendios que supongan pecado contra la caridad
Se citan estos diez signos, y naturalmente hay muchos más. Sobre todo se trata de REIVINDICAR el hogar católico frente a la tendencia secularista que pretende vaciar todo lo religioso y VICIAR las casas con toda la carga de falta de respeto, cutrerío, indiferencia religiosa e individualismo.
Queridos lectores: ¡QUE SE NOTE QUE EN VUESTRAS CASAS VIVEN FAMILIAS CATÓLICAS!
¡QUE SE NOTE QUE LA ALEGRÍA CRISTIANA REINA EN VUESTRAS CASAS!