El 31 de Octubre es el día de San Alonso Rodríguez, de la Compañía de Jesús. Vivió de 1533 a 1617.
Segoviano, hijo de unos prósperos comerciantes, Alonso vivió de forma normal y planteó su futuro desde el trabajo honrado y la formación de una familia. Se casó y tuvo dos hijos, pero en varios episodios fue muriendo toda esa familia y sintió en su corazón la llamada de Dios a la vida consagrada.
Ya con 40 años era difícil ser aceptado en la Compañía de Jesús, pues además no tenía estudios universitarios. Sin embargo la Providencia hizo que el Superior lo admitiera como hermano lego, y lo destinara a un colegio de los jesuitas en la isla de Mallorca, para hacer la función de portero, labor que
ejerció durante 45 años. Su forma de tratar a todos era amabilísima y exquisita, admirable por su santidad.
Sobre todo destacaba su trato con los inoportunos y maleducados, pues siempre mantuvo la dulzura. A veces le animaban a ser más duro con éstos, pero él respondía que todo visitante era Cristo disfrazado de hermano y a Cristo no se le podía tratar mal.
Un día tuvo una visión haciendo oración y vio a San Pedro Claver en América bautizando miles de personas.
Y así fue, ya que años después ese gran santo llevó la fe a más de 300.000 habitantes de la actual Colombia. En un periodo de su vida fue muy tentado con la impureza y acudía de inmediato a la Virgen María que alejaba de él toda tentación. Su devoción a la Madre de Dios era tal que rezaba varios rosarios cada día. Sus experiencias místicas fueron conocidas por sus superiores que veían en ellas el aval de su vida santa.
Se cuenta que su superior, para probar su obediencia, cuando Alonso era ya de 80 años y estaba muy mal de salud, le ordenó que se fuera a América para colaborar en las misiones. Entonces Alonso fue silencioso a su celda y preparó su maleta para tomar el primer barco, y ya iba saliendo del colegio cuando el superior se retractó de la orden dada.
Pasó dos días en éxtasis antes de morir. Al despertar del éxtasis pronunció tres veces el nombre de Jesús y expiró.
San Alonso Rodríguez, humildísimo enamorado de Cristo, intercede por nosotros
