Melquiades fue Papa de la Iglesia Católica entre los años 311 y 314. Su día es el 10 de Enero. Nacido en África del norte, llegó a Italia en 299 y estuvo a punto de perder la vida en la persecución romana contra los cristianos de inicios del siglo IV. Durante su pontificado sucedió la batalla del puente Milvio, donde
Constantino el Grande tuvo una experiencia mística que provocó su conversión al cristianismo. Fue poco después, en 313, cuando proclamó el Edicto de Milán que otorgaba libertad religiosa a los cristianos tras muchas y muy duras persecuciones. Constantino regaló una finca al Papa Melquiades que fue la primera residencia oficial del Papado en Roma: el palacio lateranense. En ese mismo lugar más tardes se construirá la Basílica de San Juan de Letrán.
Melquiades convocó un concilio para condenar la herejía donatista, que pretendía otorgar validez al sacramento en base a la dignidad del ministro celebrante y no a la eficacia de por si mismo («Ex opere operato»). Esa herejía es la que exalta la persona del ministro de la celebración y reduce la dimensión trascendente (divina) del mismo sacramento, o lo que es lo mismo, anula la objetividad del mismo como signo visible de la gracia invisible. El Papa Melquiades combatió esa herejía con éxito. El que sea considerado mártir, a pesar de morir de forma natural, es por los grandes sufrimientos que padeció en la persecución romana.
San Melquiades, Papa y Mártir, intercede por nosotros
