Fiesta de San José (Mt 2: 18-24)
«Gloria y honor a San José»
Celebramos hoy la fiesta del patriarca, padre y protector de esta sufrida Iglesia que todavía anda peregrina camino del cielo, esposo de la Virgen María y padre legal de Nuestro Señor Jesucristo.
Nunca tanto como ahora hemos sentido más la necesidad de la protección de San José ante los embates que está sufriendo la Iglesia.
San José sintió la carga sobre sus hombros al ser revestido de la obligación de ser padre, maestro y protector de Nuestro Señor Jesucristo.
Gloria y honor a este esposo singular al que se le exigió una vida íntegra de castidad.
Gloria y honor a este hombre singular que también tuvo que experimentar la persecución. Él puede ser nuestro protector en nuestra persecución actual. A los pocos, que ya son muy pocos que quedan fieles a la Iglesia de siempre le digo que acudan a San José, pues él también supo de persecuciones.
Gloria y honor a San José, pues nadie murió con mejor compañía que él: rodeado de Jesús y la Virgen María.
Gloria y honor a este hombre singular que supo superar las duras pruebas de la fe a las que fue sometido. Él también nos puede ayudar ahora, cuando la fe de la Iglesia de siempre se quiere reducir a puro mito.
¡Gloria y honor a San José!