«Jesús es un tesoro escondido; es un bien inestimable que pocas almas saben encontrar porque está ESCONDIDO, y el mundo ama lo que brilla. Ah!!!…si Jesús hubiera querido mostrarse a todas las almas con sus dones inefables, ciertamente ni una sola lo hubiera desdeñado. Pero Él no quiere que le amemos por sus dones: ÉL MISMO QUIERE SER NUESTRA RECOMPENSA»
O sea: amemos a Dios por encima de las «cosas» de Dios…………..qué gran enseñanza ante la cultura sentimentalista de hoy día….