Jesús hizo su primer milagro por intercesión de su Santísima Madre, pero la Virgen María tomo la iniciativa con las palabras “No tienen vino.” Meditamos en estas palabras, relacionándolas con las palabras de la misma Virgen en Fátima. Pues este año es el centenario de sus apariciones, nos trae el mensaje del evangelio, y Dios quiere manifestarse por medio de María. En estos días celebramos las tres manifestaciones (epifanías) de la divinidad de Jesús: la adoración de los tres Reyes Magos (a los paganos), el bautismo de Jesús (a los judíos) y las bodas de Cana (a los discípulos). Fátima es tal manifestación de la divinidad, recordando a todo hombre de los elementos de la Fe verdadera que están en gran crisis y que se tiene que recobrar. En Fátima, la Santísima Virgen dice, “No tienen a Dios; no tienen fe.”