Catecismo de la crisis en la Iglesia: EL MAGISTERIO DE LA IGLESIA (III)

EL MAGISTERIO DE LA IGLESIA

16.- ¿Quién tiene en la Iglesia el poder de enseñar con autoridad (poder magisterial)?

El magisterio eclesiástico, por derecho divino, pertenece al Papa para la Iglesia Universal, y a los Obispos para su propia diócesis.

¿Cómo reciben el Papa y los Obispos esta autoridad?- El Papa es el sucesor de San Pedro, y los Obispos son sucesores de los Apóstoles a quienes Nuestro Señor Jesucristo personalmente instituyó como doctores supremos de la fe. Ellos recibieron de Dios la carga de anunciar a sus discípulos la doctrina cristiana, de vigilarla y mantenerla pura. De esta manera, ellos continúan con la obra de Nuestro Señor Jesucristo, el cual, después de su Ascensión no está con nosotros de manera visible.

¿Nuestro Señor ha mencionado claramente este poder del magisterio otorgado a los Obispos?- Jesús dijo a sus Apóstoles: “Quien los escuche, a mí me escucha, y quien los rechace a mí me rechaza” (Lc. 10, 16). Esto se aplica también a los Obispos que son los sucesores de los Apóstoles.

 

17 ¿El magisterio eclesiástico es infalible?

Si, el magisterio eclesiástico es infalible. Pero son necesarias ciertas condiciones para que eso ocurra. Si las condiciones no son completadas, los obispos y el papa pueden cometer errores. Una declaración o una homilía, incluso una encíclica pontifical o un texto conciliar no son necesariamente infalibles. Sólo lo son las afirmaciones por las que la infabilidad es reivindicada.

 

18 ¿Cuándo es infalible el papa?

El papa es infalible cuando habla excathedra, es decir que, como supremo doctor de los pueblos, eleva una verdad al rango de dogma obligando a todos los fieles. En este caso, la asistencia del Espíritu Santo es asegurada al papa, de suerte que no se puede equivocar. Los teólogos atribuyen generalmente al papa el privilegio de la infabilidad en algunos otros casos, por ejemplo en las canonizaciones (1), en las leyes generales de la Iglesia, o cuando se hace eco de todos sus predecesores.

¿En dónde podemos encontrar expuestas las condiciones para que el Papa sea infalible?- Las condiciones por las que el papa habla infaliblemente son claramente expuestas por el primer concilio Vaticano, que ha definido precisamente esta infablilidad pontifical. El concilio enseña:

Cuando el pontífice romano habla excathedra, es decir que, en el ejercicio de su cargo de pastor y de doctor de todos los cristianos, él define, en virtud de su suprema autoridad apostólica, que una doctrina concerniente a la fe o a la moral debe ser  acogida   por toda la Iglesia, él goza, en virtud de la asistencia divina que le ha sido prometida en la persona de San Pedro, de esta infabilidad  de la que el divino redentor ha querido proveer a su Iglesia cuando define la doctrina sobre la fe y la moral.

¿Qué se puede resaltar en este texto del concilio Vaticano I?- Leyendo atentamente este texto del Concilio Vaticano I, se resalta que las condiciones de la infabilidad pontifical son en número de cuatro:

-El Papa debe hablar “en el ejercicio de su cargo de pastor y de doctor de todos los cristianos”, es decir, no de manera privada, sino como jefe de la Iglesia, mencionando

explícitamente “su suprema autoridad apostólica” recibida inmediatamente de Cristo;

-El objeto sobre el que se pronuncia debe ser “una doctrina concerniente a la fe o a la moral”;

-Esta doctrina no debe ser solamente enseñada: el papa debe declararla obligatoria por un acto de autoridad (“él define, en virtud de su suprema autoridad apostólica, que una doctrina […] debe ser tenida”);

-Esta voluntad de obligar debe dirigirse a “toda la Iglesia”.

¿La manifestación de la voluntad de obligar a toda la Iglesia, es esencial para que un acto del papa sea infalible?- Si, la manifestación hecha por el papa de su voluntad de obligar a toda la Iglesia sobre un punto de doctrina o de moral, es necesaria para que la infabilidad sea procedente: este acto de autoridad es el elemento esencial de la definición excathedra.

¿Cómo manifiesta el papa su voluntad de obligar?- El papa manifiesta su voluntad de instituir una doctrina obligatoria dentro de la Iglesia declarando claramente que los que la rehúsen no tienen la fe católica y por lo tanto están fuera de la Iglesia.

¿El Papa puede utilizar su infabilidad para imponer novedades? La infabilidad pontifical está completamente al servicio de la conservación de la fe, que, como lo hemos visto, es inmutable y necesaria para la salud.2 El Vaticano I enseña:

-El Espíritu Santo no ha sido prometido a los sucesores de Pedro para que hagan conocer por su revelación una nueva doctrina, sino que por su asistencia guarden santamente y expongan fidedignamente la Revelación transmitida a los Apóstoles, es decir, el depósito de la fe .

¿Es frecuente la definición solemne (infabilidad) de una verdad de fe?- La definición solemne de una verdad de fe no es frecuente; numerosos papas no han utilizado jamás este poder. Hay un caso de este género en el siglo XX: La definición del dogma de la asunción de la Virgen María al Cielo, por el papa Pío XII, el primero de noviembre de 1950.

¿Cómo manifestó Pío XII su voluntad de obligar, en la definición del dogma de la asunción?- Pío XII proclama el dogma de la asunción de Nuestra Señora declarando, en la constitución apostólica Munificentissimus Deus:

Por la autoridad de Nuestro Señor Jesucristo, de los bienaventurados apóstoles Pedro y Pablo y por nuestra propia autoridad, afirmamos, declaramos y definimos como un dogma divinamente revelado que la Inmaculada Madre de Dios, María siempre virgen, después de haber terminado el curso de su vida terrestre, a sido elevada en cuerpo y alma a la gloria celestial. Por consecuencia, si alguno, Dios no quiera, osara voluntariamente poner en duda lo que ha sido definido por nos, sepa que ha abandonado totalmente la fe divina y católica  (Vaticano I, constitución dogmática Pastor æternus, DS 3070-3074; Segundo capítulo de este Catecismo: “La fe”, preguntas 12 y 15 )

 

19.- ¿Cuando son infalibles los Obispos?

Los obispos son infalibles en dos casos.

  • 1. Cuando proclaman solemnemente una verdad de fe en un concilio ecuménico1 en unión con el papa, su jefe supremo. Todos los concilios ecuménicos anteriores han proclamado de esta manera verdades de fe. Ahora bien, es importante que el papa apruebe estas decisiones, incluso si no es necesario que esté presente en el concilio. Un concilio en el cual los decretos no han sido aprobados por el papa no podría ser considerado infalible.
  • 2. Los obispos son igualmente infalibles, aunque estén dispersados por toda la tierra, cuando sean unánimes en enseñar una verdad como perteneciente al depósito de la fe. Es el caso de los artículos de fe generales que han sido enseñados desde hace mucho tiempo en la Iglesia, sin haberlos puesto en duda.

¿Cómo llamamos a los dos modos de infabilidad de los obispos?- 1.- Una afirmación infalible hecha por el papa o por un concilio es llamado juicio solemne; es un acto del magisterio extraordinario (o solemne) de la Iglesia; 2.- La transmisión infalible de la fe hecha por los obispos dispersos, se llama, al contrario, el magisterio ordinario universal (a veces abreviado M.O.U.).

¿No es suficiente un solo modo de infabilidad? ¿Por qué hay dos?- En tiempo normal, la enseñanza común de los obispos (MOU) es suficiente para conocer con certeza las verdades de la fe. Pero en tiempo de crisis, cuando los obispos se oponen entre ellos o, simplemente son negligentes en utilizar su autoridad para recordar la verdad revelada, no podemos recurrir a este criterio. Es necesario, para resolver la crisis, un acto del magisterio extraordinario, es decir, un juicio solemne pronunciado por un concilio o por un papa.

¿Podría darnos un ejemplo?- Todos los cristianos creían con certeza en la presencia real del cuerpo y sangre de Nuestro Señor Jesucristo en el sacramento de la Eucaristía antes de ser solemnemente definida. Era enseñada por toda la Iglesia como una verdad de fe. Sin embargo, la negación de esta verdad por los protestantes hizo necesaria la definición solemne por el concilio de Trento. De hecho, los ataques de los herejes son una ocasión para la Iglesia de definir solemnemente una verdad.

¿Cuál es la ventaja de un juicio solemne sobre el M.O.U.?. – El juicio solemne hecho por el papa o el concilio, tiene la ventaja de resolver una dificultad doctrinal por un juicio único, de una autoridad incontestable, mientras que el M.O.U. se refiere a una multitud de actos puestos en términos y contextos diversos por los diferentes obispos; es, pues, más difícil de discernir.

¿Puede precisar que es el M.O.U.?- Pío IX nos da la siguiente definición: El magisterio ordinario universal es el magisterio ordinario que toda la Iglesia repartida por todo el universo transmite como divinamente revelado, y, como consecuencia, que cuenta con un consentimiento unánime y universal por los teólogos católicos, como perteneciente a la fe.2

¿Qué manifiesta esta definición?- Esta definición manifiesta que, como las enseñanzas del papa, la enseñanza universal de los obispos (M.O.U.) no es infalible mas que bajo ciertas condiciones.

Para que un punto de doctrina sea infaliblemente cierto en virtud del M.O.U., ¿no es suficiente que todos los obispos del mundo estén, en un momento dado, unánimes en aceptarla?- No, no es suficiente que todos los obispos adopten simultáneamente una nueva teoría para que ésta se haga infalible. La infabilidad del M.O.U. no se puede aplicar mas que a:

  1. Un concilio ecuménico es un concilio de toda la Iglesia en el cual los decretos son válidos para la Iglesia Universal; ecuménico significa aquí “general”. En el caso contrario, hablamos de Concilio particular o de sínodo, es decir, el que comprende a los Obispos de una cierta parte de la Iglesia y sus decisiones no valen más que para ella. 2. Carta del Papa Pío IX al arzobispo de Munich el 21 de diciembre de 1863, DS 2880 (FC443).
  2. Una verdad tocante a la fe o a la moral.
  3. Que los obispos enseñen con autoridad (es lo propio del magisterio).
  4. De manera universalmente unánime.
  5. Como divinamente revelada a los Apóstoles o necesaria para guardar el depósito de la fe, y por tanto, inmutable y obligatoria.

Sin estas condiciones no son cumplidas, no hay infabilidad

¿Solamente una doctrina que los obispos enseñan como revelada a los apóstoles y transmitida hasta nuestros días por la Tradición puede gozar de la infabilidad del M.O.U.? Sí, solo una verdad que los obispos sean unánimes en enseñar  con autoridad como perteneciente al depósito de la fe (o necesariamente ligada a él) puede ser garantizada por la infabilidad del M.O.U

¿Cuál es la razón de esta condición?- El magisterio no ha sido instituido para revelar nuevas doctrinas, sino solamente para transmitir las verdades que ya han sido reveladas a los Apóstoles. Es esta transmisión –y no agregados eventuales que le serían extraños- que protege la infabilidad.

 

20.- ¿Qué parte tienen los obispos en la actual crisis de la Iglesia?

“La crisis de la Iglesia es una crisis de obispos”, ha dicho el cardenal Seper1. De los cuatro mil obispos de la Iglesia Católica, hay ciertamente quienes quieren ser católicos y servir a la fe, pero en la mayor parte de ellos, la fe es mal entendida. En lugar de defenderla, dejan hacer a los sacerdotes y profesores que niegan una o varias verdades de fe; o hasta los apoyan. Muchos de los obispos sostienen abiertamente posiciones que son incompatibles con la fe y la moral católicas.

¿Puede citarme algunos ejemplos?- En Francia, el cardenal Lustiger, arzobispo de París, enseña públicamente que los judíos no tienen necesidad de convertirse al cristianismo.

Asimismo, Monseñor Doré, arzobispo de Estrasburgo (y antiguo docente de la facultad de teología del Instituto Católico de París), niega que los judíos que han rechazado a Jesucristo puedan ser considerados como “infieles” y “ciegos”: no son ellos quienes se tienen que convertir, sino al contrario, los católicos quienes han usurpado su lugar pretendiendo ser el “nuevo Israel”2.

¿Estas tesis son directamente contrarias a la enseñanza de la Iglesia?- La enseñanza de los Apóstoles es muy clara. San Pablo habla explícitamente de la incredulidad de los judíos (Rom. 11, 20) y de su ceguera ( Rom. 11, 25; 2 Cor 3, 15; etc.); afirma que, en ese estado, “no complacen a Dios”, sino que al contrario, son sujetos de su cólera. (1 Tes. 2, 14-16). El dulce San Juan habla de “esos que se dicen judíos y no lo son, sino que son la Sinagoga de Satán” (Ap. 2, 9). San Pedro les echa en cara, el día de Pentecostés: “Que toda la casa de Israel sabe ciertamente que Dios ha hecho Señor y Cristo a ese Jesús que vosotros habéis crucificado. […] Haced penitencia, y que cada uno de vosotros sea bautizado en el nombre de Jesucristo, para la remisión de vuestros pecados”. (Act. 2, 36-38).

¿Puede darnos más ejemplos de obispos traicionando la fe católica?- Desgraciadamente son abundantes. En el año 2001, la comisión doctrinal de Obispos de Francia, recomienda públicamente la lectura de la Biblia de ediciones Bayard, subrayando su “fidelidad profunda a la revelación divina”. Esta edición de la Biblia niega la historicidad de los hechos narrados en los Evangelios1. En el 2003, el obispo de Limoges, Mgr Dufour declara: “No sabemos si Dios existe. No lo sabemos con una certeza científica, pero lo sabemos en la fe”2. San Pablo y la Iglesia enseñan que la existencia de Dios puede ser conocida con certeza por la razón, aún sin la fe3.

El 6 de noviembre de 1997, en el curso de una conferencia en Berlín, el presidente de la conferencia episcopal alemana, Monseñor Karl Lehmann, nombra a Lutero “el doctor común” (der gemeinsame Lehrer), título que la Iglesia ha dado a Santo Tomás de Aquino!.

La lista de estos ejemplos puede ser alargada. Desgraciadamente es un hecho que numerosos obispos no profesan más los artículos de fe fundamentales.

 

21.- ¿El papa también ha tenido parte en la actual crisis de la Iglesia?

Como lo hemos señalado anteriormente, una de las características de la actual crisis de la Iglesia  es que ha sido alentada por las más altas autoridades de la Iglesia. Los papas han alentado personalmente esta crisis:

1.- Sosteniendo a los teólogos modernistas;

2.- Defendiendo ellos mismos opiniones y realizando actuaciones irreconciliables con la fe católica;

3.- Poniendo obstáculos a los defensores de la fe.

¿Puede probar estas afirmaciones?- Damos aquí algunas ilustraciones, otras aparecerán en el transcurso de este trabajo.

¿El papa Juan XXIII ha tenido parte de responsabilidad en la crisis actual?- Juan XXIII (1958-1963) es el papa que ha hecho estallar la crisis que se empollaba después de algunos decenios. A pesar de las voces que lo ponían en guardia, convoca al Concilio Vaticano II, y su aggiornamento se convierte en la palabra de orden de un trastorno sin límites, así como la introducción del espíritu del mundo en la Iglesia.

¿Podemos verdaderamente reprochar a Juan XXIII la convocatoria del Vaticano II?- Más aún que la misma convocatoria del concilio, debemos reprocharle a Juan XXIII el espíritu de esta convocatoria. En el discurso de apertura del Concilio, Juan XXIII, después de haber recordado que la Iglesia nunca ha dejado de condenar los errores, continúa: “Pero hoy, la Esposa de Cristo prefiere acudir al remedio de la misericordia, más que blandir las armas de la severidad. Ella estima que, más que condenar, ella responde mejor a las necesidades de nuestra época poniendo valor en las riquezas de nuestra doctrina. Cierto, no faltan doctrinas y opiniones falsas, peligros en los que necesitamos ponernos en guardia y que debemos descartar; pero todo esto es manifiestamente opuesto a los principios de honestidad y trae frutos tan amargos, que hoy en día los hombres parecen condenarlos por sí mismos4.” El papa se oponía así a los “profetas de la la desdicha” y pensaba que los errores desaparecerían por sí mismos “como la bruma al sol”.

¿Qué hay de reprochable en estas declaraciones? Este punto de vista no tiene nada que ver con la realidad. El budismo, el Islam y el protestantismo son errores que existen desde hace siglos y no han desaparecido por sí mismos. Al contrario, ellos se extienden aún más, por el hecho que la Iglesia se rehúsa a condenarlos hoy en día. En la misma Iglesia, a pesar de las previsiones optimistas del Papa Juan, la verdad no ha resplandecido, al contrario, una multitud de errores se han expandido.

¿Tenemos otros ejemplos del pacifismo de Juan XXIII?- Todavía peor, este episodio que Monseñor Lefebvre testimonió como miembro de la Comisión preparatoria del Concilio. En una de las reuniones donde se elegía a los expertos del Concilio, se asombró de encontrar en las listas, contrariamente al reglamento, al menos tres expertos que habían sido condenados por Roma por su doctrina. Al fin de la reunión, el Cardenal Ottaviani se acercó a Monseñor Lefebvre y le explicó que ese había sido el deseo expreso del Papa. El papa quería pues en el Concilio expertos cuya integridad de la fe estuviera sujeta a fianza!.

¿Cuál fue la actitud del sucesor de Juan XXIII, el papa Paulo VI?- El papa Paulo VI (19631978) que continúa el concilio después de la muerte de Juan XXIII, sostiene claramente a los liberales. El nombra los cuatro cardenales Döpfner, Suenens, Lercaro y Agagianian moderadores del concilio. Los tres primeros eran liberales bien conocidos, el cuarto una personalidad poco destacada.

¿Paulo VI no se opuso-durante el concilio, a los obispos liberales (notablemente durante la que llamaron “la semana negra”, en noviembre de 1964)? Aún si Paulo VI se opuso a los liberales extremistas, es cierto que la situación de los conservadores entre   los Padres del Concilio estaba casi bloqueada de manera que los liberales gozaban visiblemente del favor del Papa.

El 7 de diciembre de 1965, declara a los obispos reunidos para la clausura del concilio:

La religión del Dios que se hizo hombre, se encontró con la religión (porque es una sola) del hombre que se hace dios. ¿Qué es lo que llegó? ¿un choc, una lucha, un anatema? Eso podía llegar; pero no ha tenido lugar. La vieja historia del samaritano ha sido el modelo de espiritualidad del Concilio, una gran simpatía lo ha invadido completamente. El descubrimiento de las necesidades humanas (y son tan grandes que los hijos de la tierra se hacen mayores) a absorbido la atención de nuestro Sínodo. Reconózcanle al menos este mérito, ustedes, humanistas modernos, que renuncian a la trascendencia de las cosas supremas, y saben reconocer nuestro nuevo humanismo: nosotros también mas que nadie, nosotros tenemos el culto del hombre1.

Qué hay que pensar de esta declaración?- Podemos compararla con la consigna dada por san Pío X en su primera encíclica:

Es necesario, por todos los medios y a precio de todos los esfuerzos, desarraigar enteramente esta monstruosa y detestable iniquidad propia de los tiempos en que vivimos y por la cual el hombre se sustituye a Dios2.

La franc-masonería, que tiene como objetivo la destrucción de la Iglesia Católica, tiene el culto del hombre, pero no la Iglesia Católica. Escuchando a Paulo VI promover el culto del hombre, los franc-masones deben de saborear su triunfo. ¿No es la realización de sus planes forjados en el siglo XIX?.

Este pontífice, como la mayor parte de sus contemporáneos, será necesariamente mas o menos imbuido de principios […] humanitarios que nosotros hemos empezado a poner en circulación […] Usted ha predicado una revolución en tiara y capa, yendo con la cruz y la bandera, una revolución que no tendrá necesidad mas que de ser un poco aguijoneada para poner fuego a los cuatro puntos de la Tierra2.

¿Podemos verdaderamente decir que Pulo VI ha sido este papa imbuido de principios humanitarios?- El siguiente himno que Paulo VI entonó cuando el hombre puso el pie en la luna, podría ir muy bien en los labios de un francmasón: “Honor al hombre, al pensamiento, a la ciencia, a la técnica, al trabajo, al atrevimiento humano. […] Honor al hombre, rey de la tierra y ahora príncipe de los cielos3”.

¿Paulo VI tiene otras responsabilidades en la crisis actual?- Paulo VI es también el Papa que ha introducido el nuevo rito de la misa, del cual analizaremos su nocividad.

¿Qué mas podemos señalar acerca de Paulo VI?- Es bajo el reinado de Paulo VI que comienza la persecución de los sacerdotes que querían permanecer católicos y que se rehusaban dar a sus fieles al protestantismo, al modernismo y a la apostasía.

¿Juan Pablo II no ha rectificado?- Dotado de un temperamento más fuerte que el de Paulo VI, Juan Pablo II ha podido parecer más firme en ciertos puntos. Pero también es voluntariamente más determinante en la vía de las novedades. El ha realizado acciones a las cuales se les puede poner la nota de apostasía o de conato de herejía.

¿Puede dar un ejemplo?- El 29 de mayo de 1982, Juan Pablo II recita el Credo con el pretendido arzobispo anglicano, Monseñor Runcie, en la catedral de Canterbury, luego da la bendición con él. El jefe anglicano es revestido de todos sus ornamentos pontificales, a pesar de ser un laico en razón de la invalidez de las ordenaciones anglicanas4.

¿Hay más ejemplos de este género?- Hay peores: la cooperación en los ritos idolátricos. En agosto de 1985, Juan Pablo II participa en un rito animista en un bosque sagrado de Togo. El 2 de febrero de 1986, en Bombay, recibe en su frente el tilak, simbolizando el tercer ojo de Shiva5. El 5 de febrero, en Madras, recibe el Vibhuti (cenizas sagradas) signo de los adoradores de Shiva y Vishnú6.

¿Hasta donde ha ido esta cooperación del Papa en los falsos cultos?- La triste cumbre de estas actividades fue alcanzada por la reunión de Asís, el 27 de Octubre de 1986. El Papa había invitado a todas las religiones del mundo a rezar por la paz en Asís, cada cual según su rito. Las iglesias católicas fueron puestas a su disposición para la celebración de los ritos paganos. En la iglesia de San Pietro, se entronizó una estatua de buda sobre el tabernáculo.

¿No es bueno promover la paz y hacer orar con esta intención? – No es la paz, sino la idolatría y la superstición que son malas, ya que llevan un gran atentado al honor de Dios. Una buena acción no permite jamás cometer o animar a cometer actos malos en sí.

 

22.- Entonces, ¿por qué estos papas pasan por conservadores? Los papas conciliares pasan generalmente por conservadores porque continúan defendiendo ciertos principios de moral natural que el mundo moderno rehúsa, y que, en materia dogmática, buscan frenar mayores avances de los teólogos modernistas.

¿Se puede proporcionar otra explicación de esta falsa reputación de conservadores?- Una característica de la crisis actual es la gran confusión de ideas y puntos de vista que reina hasta dentro de la Iglesia Católica. Es suficiente con defender tal punto de doctrina católica para ser calificado de conservador. La expresión no significa gran cosa.

En materia de moral, ¿por qué el Papa Paulo VI tiene la reputación de ser un papa conservador?- El papa Paulo VI pasa por conservador a causa de la encíclica Humanae Vitae (25 de julio de 1968) que recuerda la oposición de la Iglesia a la contracepción. Esta encíclica ha excitado mucho odio contra él, y numerosos episcopados se le han mostrado abiertamente opuestos.

Viendo el contexto, esta encíclica Humanae Vitae, ¿no fue un acto de valentía de parte de Paulo VI?- La encíclica Humanae Vitae reclama sin duda una cierta valentía de parte de Paulo VI, y ella es ciertamente la prueba de la asistencia de Dios hacia su Iglesia incluso en medio de la actual crisis. Pero no hay que olvidar que el Papa Paulo VI era el primer responsable del contexto en cuestión, pues él había negado que la contracepción estuviera claramente condenada en el Concilio Vaticano II. La puerta no hubiera sido tan difícil de cerrar si no hubiera sido entreabierta por el Concilio.

¿Juan Pablo II no es, de cara al mundo moderno, un gran heraldo de la moral cristiana?- Juan Pablo II es descrito como un conservador endurecido en razón en su clara posición en cuestiones de moral conyugal y de celibato. No obstante, no nos equivoquemos: incluso en estas materias tiene algunos ablandamientos doctrinales.

¿Puede darnos un ejemplo de ablandamiento en materia de moral en la enseñanza de Juan Pablo II?- Las declaraciones del papa dan la impresión que, si la contracepción artificial está prohibida, la regulación natural de los nacimientos sería autorizada sin restricción. Pues, según la doctrina católica, ella está autorizada bajo ciertas condiciones: Siempre y cuando, temporal o definitivamente, una pareja, por razones graves, no puede tener más hijos.

¿La enseñanza moral de Juan Pablo II se aparta de la Tradición en otros puntos?- Se constata, en las justificaciones de la moral cristiana dadas por Juan Pablo II un desplazamiento de acento: Es siempre el argumento de la dignidad del hombre que es puesto primero. El Nuevo Catecismo de la Iglesia Católica afirma:

El asesinato de un ser humano es gravemente contrario a la dignidad de la persona y a la santidad del Creador.

Tal inversión del orden muestra hasta ahora hasta donde llega el humanismo de los hombres de la Iglesia. Recordemos las palabras de Paulo VI afirmando que la Iglesia también tiene el “culto del hombre”.

En materia doctrinal, ¿Paulo VI no ha defendido la doctrina tradicional en su Credo del Pueblo de Dios? Y Juan Pablo II en la carta apostólica Ordinatio Sacerdotalis del 22 de mayo de 1994, declara claramente que las ordenaciones de mujeres están absolutamente prohibidas.- Los papas actuales no son (Y gracias a Dios no pueden ser) deficientes en todo. Pero es suficiente que lo sean en algunos puntos para que las consecuencias sean trágicas para el conjunto de la Iglesia. De hecho, estos papas, en numerosos casos, han sostenido a los modernistas, han abandonado a los defensores de la verdad católica y hasta los han condenado.

¿Puede dar ejemplos del soporte dado por Juan Pablo II a los modernistas?- Juan Pablo II nombró cardenales a cuatro neomodernistas: los teólogos franceses Henri de Lubac e Yves Congar, y a los teólogos de lengua alemana Hans Urs von Baltasar y Walter Kasper.

¿Quién es Henri de Lubac?- Henri de Lubac (jesuita, 1896-1991) es el principal líder francés de lo que han llamado “nueva teología”. Esta reanudó, después de la Segunda Guerra Mundial, las orientaciones del modernismo condenado por San Pío X en 1907(confusión de lo natural y lo sobrenatural, evolucionismo doctrinal, etc.), pero da manera más hábil. El jesuita Teilhard de Chardin (1881-1955) decía de San Agustín: No me hablen de este hombre nefasto; ha perdido todo introduciendo lo sobrenatural”1;su colega y amigo Henri de Lubac, que siempre lo defendió (no duda incluso en falsear su correspondencia, pretendiendo publicarla integralmente2), es mucho más sutil: admite en principio la distinción entre natural y sobrenatural, pero enseguida trabaja en sus libros sabiamente para hacerle perder toda consistencia. Sin negar nada categóricamente, la “nueva teología”  sobresale por volver todo borroso, poniendo sistemáticamente a continuación los autores menos precisos. Ella invoca a los Padres de la Iglesia contra Santo Tomás, los Padres griegos contra los Padres latinos, y si hace falta, al mismo Santo Tomás de Aquino contra sus comentadores más explícitos.- Pío XII condenó las principales tesis de la “nueva teología” en Humani  Generis, en 1950, pero la encíclica apenas se obedeció. Henri de Lubac, que había sido suspendido de la enseñanza por sus superiores romanos, fue teólogo en el Concilio Vaticano II y nombrado cardenal por Juan Pablo II en 1983.

¿Quién es Yves Congar?- Yves Congar (dominico, 1904-1995) es el padre de la “nueva eclesiología”, es decir, de la nueva manera de concebir la Iglesia. Discípulo del Padre Chenu, siguió de curso a la facultad protestante de Estrasburgo apenas fue ordenado sacerdote. El decide consagrar su vida al acercamiento de la Iglesia con los herejes y cismáticos, llegando hasta pretender que Lutero “es uno de los más grandes genios religiosos de toda la historia. Yo lo pongo en el mismo plano que San Agustín, Santo Tomás de Aquino o Pascal. De cierta manera, aún más grande. El ha replanteado todo el cristianismo […]. Yo he estudiado mucho a Lutero. No pasa apenas un mes sin que yo vuelva a sus escritos.3”  Sometido a partir de 1947 a una vigilancia estrecha (él dirá más tarde: “Yo no he conocido […] a partir del comienzo de 1947 hasta el fin de 1956, que un seguimiento ininterrumpido de denuncias, de advertencias, de medidas restrictivas o discriminatorias, de intervenciones desconfiadas”4.), el conserva ferozmente las mismas ideas (el cuenta, en su diario, que fue en dos ocasiones a Roma, a orinar contra la puerta del Santo Oficio en señal de rebelión5!). Yves Congar fue, sin embargo, llamado como experto al Concilio Vaticano II por Juan XXIII y ejerce una gran influencia en el concilio. Juan Pablo II lo nombra cardenal en octubre de 1994.

¿Quién es Hans Urs von Baltasar?- En la línea de la “nueva teología”, Hans Urs von Baltasar (suizo, 1905-1988), se emplea en reconstruir la teología en torno a los filósofos y poetas modernos. Muy influenciado por la falsa mística Adrienne von Speyr (1902-1967)1, igualmente ha desarrollado la teoría de un infierno vida. Nombrado cardenal por Juan Pablo II en 1988, su muerte le impide recibir el birrete cardenalicio.

¿Quién es Walter Kasper?- Presidente (desde el 2001) del Consejo pontifical para la promoción de la unidad de los cristianos, Walter Kasper es por tanto enemigo declarado de la fe católica. En su libro Jesús el Cristo, niega abiertamente los numerosos milagros evangélicos (“[…] Nos es necesario calificar de legendarios muchas de las historias de milagros contenidas en los Evangelios. Necesitamos buscar menos en estas leyendas su contenido histórico que su objetivo teológico”2). Duda de la historicidad de la Resurrección (“Esta constatación de la existencia de un núcleo histórico en los relatos concernientes a la tumba, no implica de ninguna manera una prueba a favor de la resurrección”3), y llega hasta el poner en duda la divinidad de Nuestro Señor, empleando páginas y páginas para relativisar todos los pasajes de la escritura en que se hace mención. Y a pesar de todo, Kasper fue nombrado cardenal por Juan Pablo II en el 2001 sin haberse retractado de ninguna de sus tesis.

¿Por lo tanto Juan Pablo II no sostiene los esfuerzos de los conservadores? Cuando Dom Gérard Calvet, abad benedictino de Barroux, se rindió a Roma en abril de 1995 con setenta y cinco mil firmas para pedir la libertad de la celebración de la misa tradicional, fue invitado a concelebrar con el Papa la nueva misa para “dar un signo”. El concelebró, pero la liberalización de la antigua misa no fue acordada. En cuanto al obispo conservador de Coire, Monseñor Haas, en lugar de ayudarlo a levantar su diócesis, Juan Pablo II le dio dos obispos auxiliares progresistas, antes de alejarlo y nombrarlo arzobispo de Liechtenstein.

¿Qué podemos decir, para concluir, sobre Juan Pablo II?- No hay que olvidar que la reunión de Asís, así como todo el movimiento ecuménico son una de las intenciones principales de Juan Pablo II.

 

21.- Entonces, los papas postconciliares son heréticos?- Es herético, en el sentido preciso del término, solamente el que niega expresamente un dogma. Paulo VI y Juan Pablo II han hecho y dicho cosas que han dañado gravemente a la Iglesia y a la fe, y que han podido confortar a los heréticos en su manera de obrar,  pero no se puede probar que hayan negado voluntariamente un dogma. Ellos deben entonces ser contados en el número de los católicos liberales, que quieren por una parte permanecer católicos, pero desean, por otra parte, agradar al mundo y hacer todo por ir a su encuentro.

¿No puede pasar que un católico liberal se concilie de tal manera con el mundo que llegue a la herejía?- Una de las características de este tipo de católicos es que nunca quieren es por esta sola razón que les es muy difícil sostener una herejía con pertinacia.

¿La pertinacia en el error es absolutamente necesaria para ser hereje?- Es suficiente contradecir un solo dogma para ser materialmente hereje, pero es necesario, para cometer realmente el pecado de herejía (ser formalmente hereje), que esta negación sea consciente y voluntaria. Un niño que, habiendo aprendido mal su catecismo, atribuye dos personas a Nuestro Señor Jesucristo, ha cometido un pecado de pereza, pero no el pecado de herejía (el profiere una herejía sin tener conciencia, el niño no es formalmente hereje). Un católico liberal multiplicando las ambigüedades y las concesiones para agradar al mundo, puede llegar a proferir herejías sin tener verdadera conciencia: el no es formalmente hereje.

 

¿Cuál es la enseñanza de la Iglesia sobre los católicos liberales?- De éstos católicos liberales, Pío IX dijo: Estos son más peligrosos y más funestos que los enemigos declarados […] por que, manteniéndose en le límite extremo de las opiniones formalmente condenadas , dan una cierta apariencia de integridad y de doctrina irreprochable, engañando así estos imprudentes amantes de la conciliación haciendo caer a la gente honesta, los cuales se volverían contra un error declarado1.

22.- ¿Encontramos en la historia ejemplos análogos de deficiencia en los papas?

Si hay, desgraciadamente, un cierto número de papas cuya vida moral no fue ejemplar, aunque en las cuestiones de doctrina fueron casi siempre irreprochables. No obstante, hay algunos ejemplos de papas que cayeron en el error o que, cuando menos, sostuvieron el error en vez de combatirlo. Estos papas fueron Liberio, Honorio I y Juan XXII.

¿Cómo sostuvo el error el Papa Liberio?- El Papa Liberio (352-366) se plegó a la presión de los arrianos que negaban la divinidad de Cristo. Excomulgó en el año 357 al obispo Atanasio, el valiente defensor de la doctrina católica, y sostuvo una profesión de fe ambigua2. La Iglesia honra ahora a Atanasio como un santo, y no así al Papa Liberio.

¿Cómo sostuvo el error el Papa Honorio I? – En el siglo VII, Sergio, patriarca de Constantinopla inventó la herejía del monotelismo. Este error pretende que no hay en Cristo mas que una sola voluntad, cuando en realidad Cristo posee dos voluntades: la voluntad divina y la voluntad humana. Sergio hizo caer a Honorio I (625-638) y lo ganó para su causa.

¿El Papa Honorio se adhiere verdaderamente al error del monotelismo?- Parece ser que Honorio no compartía verdaderamente el error del patriarca de Constantinopla, pero, no comprendiendo muy bien toda la cuestión, y no queriendo una querella de teólogos, toma el partido de Sergio e impone silencio a san Sofronio que defendía la causa católica. Por esta razón, Honorio fue, después de su muerte, condenado por el Papa León II3.

¿Cómo sostuvo el error el papa Juan XXII?- El papa Juan XXII (1316-1334) sostenía la falsa doctrina según la cual las almas de los difuntos no obtienen la visión beatífica y por tanto la plena beatitud sino después del juicio universal. En cambio, ellos gozarían solamente de la visión de la humanidad de Cristo. Asimismo, los demonios y los hombres réprobos no recibirían la pena eterna del infierno sino hasta el último juicio. El tuvo, a pesar de todo, la humildad de dejarse corregir y se retractó de su error el 3 de diciembre de 1334, un día antes de su muerte4.

¿Qué lección nos dejan estos tres ejemplos?- Por estos ejemplos, y en particular el de San Atanasio, vemos que puede pasar que un solo obispo tenga razón en contra del Papa.

Padre Matthias Gaudron

(1) Al menos las canonizaciones anteriores a 1983. Las simplificaciones de los procesos aportadas en esta fecha, así como la verdadera explosión en el número de canonizaciones, permiten en efecto dudar seriamente que el papa actual tenga la misma intención de sus predecesores al efectuar las canonizaciones. (si no se tiene la firme intención de comprometer a la Iglesia universal, no puede haber infabilidad).

Nota: Por motivos de edición o ha sido posible incluir las notas de este capítulo, pero pueden consultarse en la edición completa en nuestra sección de descargas.

Del mismo autor

El Rin desemboca en el Tiber: Historia del Concilio Vaticano II Cap. V

https://youtu.be/xh3lqMiy2f4 La desconocida historia del Concilio Vaticano II contada por uno de...

Últimos Artículos

En la muerte del papa Francisco

Algunas personas me han preguntado cómo es que no...