El 16 de diciembre se recuerda a un numeroso grupo de mujeres jóvenes del norte de África, todas ellas vírgenes, que fueron perseguidas por orden del Rey vándalo Hunerico en el siglo V, ya que desde la monarquía se pretendía imponer la herejía de Arrio (que negaba la filiación divina de Cristo) a toda la población. Estas mujeres fueron encarceladas en 480 y amenazadas con torturas para que renegaran de la fe católica. Todas fueron asesinadas por odio a la fe y no se registró ni una sola apostasía.
Santas Vírgenes Mártires de África, interceded por nosotros