Esta gente no está besando a Jorge Mario Bergoglio, no se trata sólo de él, y de su persona, como parece pensar.
Quieren besar a Pedro, el Vicario de Cristo. Es monstruoso negarles eso.
Esta gente no está besando a Jorge Mario Bergoglio, no se trata sólo de él, y de su persona, como parece pensar.
Quieren besar a Pedro, el Vicario de Cristo. Es monstruoso negarles eso.