El arrepentimiento es la condición indispensable del perdón. Cristo mismo nos dio ejemplo con su conducta; de los dos ladrones crucificados con Él, el Evangelio da cuenta que sólo perdonó a uno: al que se arrepintió.
El arrepentimiento es la condición indispensable del perdón. Cristo mismo nos dio ejemplo con su conducta; de los dos ladrones crucificados con Él, el Evangelio da cuenta que sólo perdonó a uno: al que se arrepintió.